lunes, 26 de enero de 2015

Nuestra pandilla, de Philip Roth

Richard Nixon pasó a la historia por ser el único presidente de Estados Unidos, hasta ahora, en dimitir a su cargo como consecuencia del escándalo de Watergate. Las numerosas películas sobre el tema lo muestran como un personaje oscuro, enredador, con muchos secretos para esconder y un rabo de paja inmenso.

Lo que Philip Roth hace en estos 6 textos satíricos que fueron publicados parcialmente en The New York of Review en 1971 es revelar la clase de político que es Nixon, antes de que ocurriera el Watergate.

Si el periodismo es el ejercicio de tratar de anticiparse, de adelantarse o prever lo que puede ocurrir en una sociedad, Philip Roth en este libro logra su cometido: alerta a la sociedad sobre el riesgo que representa un poder presidencial omnipotente encabezado por una persona de "confusas" o "cuestionables" por decir lo menos, ideas políticas.

Pero el valor del libro hoy por hoy no está en anticipar algo que todos sabemos cómo terminó. El valor está en el uso de la sátira y el humor como contundentes armas políticas para desenmascarar poderes a partir del uso de la palabra. La burla, la mofa que hace el autor de los argumentos del Presidente, hasta llevarlos al extremo del absurdo, son válidos ayer y hoy, aunque el lector de hoy desconozca el contexto específico en el que ocurrieron los hechos: La defensa que hace Nixon del derecho del nonato, para oponerse al aborto, se convierte en una hilarante entrevista en la que Nixon dice cosas como que se siente feto aún... 

Es decir, más allá de la política local norteamericana (que nunca es local) el lector encuentra en estos textos satíricos argumentos para defender ideas antimilitaristas, pro aborto e antiimperialistas, a partir de situaciones absurdas que llegan a límites insospechados, como el supuesto asesinato de Nixon que es negado por el portavoz de la Casa Blanca, quien exhibe en una rueda de prensa una radiografía de la cadera del presidente, para demostrar que está muy bien.

Este libro puede ser interesante para quienes ejercen el periodismo de opinión con sátira y humor. El lector puede reemplazar el nombre de Nixon por el del personaje político actual que prefiera, y muchas de las argumentaciones delirantes del presidente encajarán hoy como anillo al dedo. 

Algunas pocas frases:
en este gobierno los fetos y los embriones de Estados Unidos por fin tienen una voz que los represente.

mi desempeño del cargo contribuya algún día a crear un mundo en el que todos, sin consideración de su raza, credo o color, sean nonatos. 

Aquí me tienen, presidente de los Estados Unidos de Norteamérica y líder del Mundo Libre, trabajando como un esclavo con todas y cada una de las fibras de mi ser, entregado noche y día, trescientos sesenta y cinco días al año, al único propósito de salir reelegido...

(los medios) No, nunca hablan de lo que no hemos hecho, siempre se quedan con lo quehemos hecho. Eso, por desgracia, es lo que esa gente considera noticia. 

Nuestra pandilla
Philip Roth
Literatura Mondadori
1971 (edición de 2008)
Barcelona
173 páginas

No hay comentarios: